sábado, 26 de noviembre de 2011

HA MUERTO EL RENCOR

Pensionista agotado
de ser niño
que descubre en las sobras
su pasado;
mercader de tumores
y desgana,
nacional cobrador
no acreditado;
arruga y maniquí,
mirada fija,
autónomo bastón
fuera de plazo.

Número cien que expresa
la locura,
valor politeísta
de un camelo,
zapatillas de felpa
en la ventana,
cobarde exposición
a los consejos;
pueril acusación:
"han sido otros";
servicios de mentiras
por teléfono.

Santos y devociones,
enredado misal
que se arrepiente,
chaqueta y sacramento
previo al crimen,
tarifa de las formas
que se mueren;
viaje subvencionado
hacia el silencio,
elegante "back-up"
de cuerpo y mente.

Has llegado, Domingo
subastando;
mi nombre adjudicado
por un vientre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario