lunes, 17 de octubre de 2011

ORACION DE CUARENTA Y DOS SEGUNDOS

En un compás de cinco
y de no verte,
perdí lleno de intentos
la salida,
corté Gordiano el hilo
en quince watios,
citando al Minotauro
en su guarida;
Sátrapa rimador,
causa encontrada,
hallazgo milagroso
en una esquina.

Y en la mesa una luna,
recortando volantes,
ha querido ser musa,
peregrina y amante;
cuadratura frustada
que buscando incisivos,
ha encontrado en los lados
amargura y principios.

Hipérbole caduca,
a destiempo el requiebro
y la respuesta,
fácil presuponer
que todo sube;
ingrávido facial
de una quincena,
ido bufonador,
comparativo,
limítrofe gestual,
selva de ofensas.

En un campo de cinco
vierte el ojo,
octubre inaugural
lleno de afueras.

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